La Ley de Segunda Oportunidad contempla el plan de pagos como un elemento fundamental, ya que permite a los deudores cancelar parte de sus obligaciones adeudadas y proteger tanto su vivienda familiar como otros activos personales, salvándolos de ser embargados.

Existen algunas opciones para cancelar parcialmente las deudas siguiendo un plan de pagos:

Opcion: Concurso Acreedores

Acogerte a la Ley de Segunda Oportunidad a través de un concurso de acreedores. La Ley de Segunda Oportunidad permite a las personas endeudadas llegar a un acuerdo para pagar sus deudas a través de un proceso llamado concurso. Como parte de este proceso, la persona presenta una propuesta donde se detalla un plan de pagos, es decir, un cronograma para ir cancelando paulatinamente el monto adeudado a los acreedores.

Para poder optar a esta opción, la persona deberá negociar con los acreedores un plan para abonar una parte y cancelar el resto en 5-7 años cumpliendo con los pagos. En otras palabras, el plan de pagos en un concurso de acreedores funciona de la siguiente manera: El plan de pagos especifica cómo y en qué plazos se realizarán los abonos, con el fin de que la persona pueda hacer frente a sus obligaciones de una forma asequible y sostenible en el tiempo. Esto le da una segunda oportunidad para solventar sus deudas sin que le embarguen bienes como su vivienda u otros activos personales.

Este plan determina una cantidad fija que el deudor abonará cada mes generalmente durante un periodo de 5 a 7 años, y que se utilizará para ir reduciendo de a poco lo que el deudor debe, en proporción a cada una de sus deudas. Si el deudor cumple con los pagos mensuales, al finalizar el plazo podrá solicitar la cancelación del resto de deuda pendiente. Por el contrario, si incumple dichos pagos, el convenio se dará por finalizado y el deudor podrá verse abocado a declararse nuevamente en concurso. Para asegurar que el deudor cumpla con los pagos mensuales del plan, normalmente tiene que ofrecer algunos bienes como “garantía”.

Esto significa que si al final no paga todo lo acordado, los acreedores podrán quedarse con esos bienes dados como garantía para cobrarse lo que falte.

En resumen, el concurso de acreedores es el procedimiento judicial regulado por ley mediante el cual un deudor insolvente negocia con sus acreedores la reestructuración de sus deudas, ya sea a través de un plan de pagos, una quita o ambas cosas. Su objetivo busca el acuerdo entre deudor y acreedores sobre cómo y en qué plazos se pagará la deuda, ya sea con o sin quita. Puede incluir la entrega de bienes en pago.

Opcion: Quita Concursal

Pedir una quita concursal, donde los acreedores reducen el monto adeudado. Una quita concursal es una reducción sobre el monto total adeudado que puede solicitar el deudor como parte de un acuerdo en el proceso concursal (o de segunda oportunidad). Para solicitarla, el deudor debe presentar una propuesta de pagos dentro del concurso donde incluya la petición de quita.

Los pasos son:

• 🔘 El deudor propone un porcentaje de reducción sobre el total de la deuda. Por ejemplo, una quita del 30% significa que pide que se les perdone el 30% de lo adeudado.

• 🔘 Los acreedores votan si aceptan o no esta reducción como parte del acuerdo global.

• 🔘 Si se aprueba, quedaría como deuda el monto restante tras aplicar el porcentaje de quita. Este monto es el que el deudor se compromete a pagar en un plan acordado.

La quita busca que resulte viable para el deudor llegar a un acuerdo de pagos y salir del concurso. Cuando por el tipo de deuda, su cuantía o la voluntad de acreedores, es posible un acuerdo de quita directo y extrajudicial, no es necesario iniciar el largo trámite de concurso.

En resumen, la quita concursal: es una reducción del monto total adeudado que puede plantear el deudor como parte de la negociación dentro del proceso concursal. En este caso, su objetivo busca el acuerdo entre deudor y acreedores sobre cómo y en qué plazos se pagará la deuda, ya sea con o sin quita. Al igual que el concurso de acreedores, puede incluir la entrega de bienes en pago.

Negociar de forma individual con cada acreedor planes de fraccionamiento de deuda. En caso de negociar de forma individual con los diferentes acreedores los planes de fraccionamiento de deuda, podría implicar que algunos podrían perdonar parte si se garantiza el pago del resto.

Para negociar de forma individual planes de fraccionamiento de deuda con cada acreedor, es necesario seguir varios pasos. Primero, se debe obtener un detalle de la deuda con cada uno, incluyendo monto, intereses y garantías. Luego, es importante contactar personalmente a los acreedores para proponerles pagar la deuda de forma fraccionada, exponiendo la situación de insolvencia. Asimismo, se debe presentar un plan de pagos realista a varios años con cuotas asumibles. También es clave escuchar sus condiciones y negociar flexibilidad en aspectos como intereses o plazos. Otra alternativa a considerar es discutir una posible quita parcial. Una vez alcanzado el acuerdo, es necesario formalizarlo por escrito y cumplir estrictamente con los pagos pactados para ganar su confianza, manteniendo comunicación y agradeciendo la oportunidad al finalizar.

Opcion: Refinanciación

Otra de las opciones de las que se dispone es la refinanciación de las deudas consolidando todo en un solo crédito con el banco a devolver en plazos más largos.

Para solicitar una refinanciación de deudas, lo primero que debe hacerse es analizar detalladamente la situación financiera actual y verificar si realmente es necesario este tipo de operación. Una vez determinado esto, se debe contactar a cada uno de los acreedores para exponerles la propuesta de refinanciación, indicando las razones por las cuales no es posible continuar pagando según los términos originales. Luego, se debe presentar un plan que incluya nuevos plazos y cuotas más acordes a la capacidad de pago, así como eventuales cambios en las condiciones como tasas de interés. Es importante negociar con flexibilidad y acercar posturas. De llegarse a un acuerdo con cada acreedor, se procede a la firma de los nuevos contratos que documenten los términos renegociados. El cumplimiento estricto de lo pactado es fundamental para lograr la refinanciación deseada.

Opcion: Acudir a fundaciones de ayuda

Como último recurso, se puede también acudir a fundaciones que intermedien con los acreedores la cancelación parcial a cambio de un plan de pagos asumible.

En resumen, para todas las opciones, la clave es negociar con opciones realistas que se cumplan, para lograr una reducción de la deuda a cambio de abonar lo que se pueda en un calendario de tiempo determinado.